¿Cómo identificar una buena cera para epilar?
Como si el laborioso ritual de retirar de raíz el vello corporal, las erupciones posteriores, las posibles reacciones alérgicas y la inversión de dinero involucrada en el proceso no fuera suficiente, también hay que saber elegir la cera correcta para epilar.
Afortunadamente, todos y cada uno de esos pequeños pasos valen la pena, pues la epilación con cera es excelente. Para definir qué producto es el indicado para tu piel, debes tomar en cuenta una serie de factores.
- El área importa: siempre debes hacerte una prueba de parche si te vas a depilar alguna parte del cuerpo por primera vez. Ya sean los brazos, las piernas, la espalda, el estómago, e incluso la línea del bikini, es importante descartar reacciones adversas.
- Sé lo suficientemente exigente: si la variedad de ceras disponible te genera confusión, tómate el tiempo de verificar los antecedentes, pros y contras de cada una de ellas. No todas son elaboradas de la misma manera, aunque tienen en común haber sido creadas para retirar el vello. Justo esto puede hacer que el proceso sea más confuso, pero es importante que puedas identificar qué tipo de cera usar con diferentes propósitos.
- Cera suave y tibia: La cera suave y tibia se elabora a base de crema o resina y se usa para encerar tiras. Se calienta suavemente y se aplica en una capa delgada sobre la piel. Se presiona una tira de tela y se retira, llevándose consigo los vellos. La cera untable se aplica cuando es necesario cubrir áreas más grandes como las piernas y los brazos completos. Toma en cuenta que, aunque esta cera es extremadamente eficaz, también se adhiere a la piel, por lo que solo debe aplicarse una vez por área.
- Cera dura tibia: Para zonas con vello más grueso o vello fino y escaso, la cera dura es una opción eficaz. Se aplica tibia y se endurece a medida que se enfría.También es conocida como cera sin tiras porque cuando adquiere su forma endurecida, actúa como la tira en sí. Para usarla, se recomienda aplicar una pequeña cantidad de aceite de pre depilación sobre la piel después de limpiarla para protegerla. Esta cera se aplica en una capa más gruesa que la cera blanda, pero también en la dirección del crecimiento del vello. La cera se adhiere a los vellos en forma de envoltura retráctil a medida que se endurece en lugar de adherirse a la piel como la cera blanda.
- Cera Suave Fría: La cera fría está lista para aplicarse, por lo que se saca directamente del bote y se aplica sobre la piel previamente higienizada. Este método es atractivo para muchas personas porque elimina el riesgo de quemarse con la cera demasiado caliente. Sin embargo, no es tan eficaz como la cera tibia y puede dejar vellos adheridos a la piel, haciendo necesario repasar varias veces la misma zona y con ello, pudiendo generar irritación.
- Cera española Marysol: Sin duda la mejor opción. También conocida como cera elástica de sistema español, retira el vello sin necesidad de emplear tiras de tela. Su principal diferencia con la cera convencional es que se derrite a menor temperatura y es mejor para aplicarse en pieles sensibles, además de que no deja residuos pegajosos. Al aplicarse esta cera, se abren los poros y eso hace más sencillo retirar el vello desde la raíz con menos dolor que usando las ceras tradicionales. Además, la cera española está elaborada con ingredientes naturales; es decir, su composición está 100% libre de químicos, por lo cual, el riesgo de sufrir irritación es mínimo. Si la empleas de manera constante para retirar el vello, lo disminuye tanto que puede tardar hasta cuatro semanas en crecer nuevamente.
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