¿Qué dice un dermatólogo acerca de la depilación?

Si formas parte del grupo de personas que desean mostrar su piel sin vello todos los días, seguramente la depilación forma parte de su rutina de belleza habitual. Sea cual sea el método de depilación que utilices; crema, navaja, cera, láser o máquina, tu piel necesita estar preparada para evitar molestias como la irritación e incluso infecciones. Aunque tomes todas las precauciones del mundo, la depilación no deja de ser una actividad agresiva para tu piel. 

¿Has notado que después del proceso de depilación tu piel suele quedar más reseca, irritada, enrojecida e incluso adolorida, cada vez más que la anterior? El estado sensible en el que se encuentra tu piel en ese momento hace que, si se expone al sol, inmediatamente después puedan aparecer manchas.  

Zonas como el rostro, ingles y axilas son las más vulnerables y con las que debes tener mayor cuidado. Cada técnica de depilación requiere cuidados específicos post-depilatorios para que la piel no sufra, pueda regenerarse correctamente y luzca hermosa:

• Cuchillas o cremas: Se trata de las técnicas más comunes y rápidas de aplicar, aunque también son las menos duraderas, pues ambas cortan el vello de forma superficial. Si utilizas cuchillas lo mejor es  proteger tu piel con gel o espuma previo al depilado, así la navaja resbalará suavemente por tu piel evitando cortes. Para las cremas depilatorias, nunca excedas el tiempo que indican las instrucciones de uso, ya que esto puede irritar de sobremanera tu piel e incluso provocarte quemaduras. 

• Ceras: Son muy eficientes de utilizar, ya que eliminan el vello desde su raíz. Pero, al utilizar este método, los poros de tu piel quedan expuestos, por lo que debes extremar precauciones en esta situación. Después del tirón de cera, presiona suavemente la piel para ayudar a cerrar los poros, también puedes usar una toallita post depilación o un algodón humedecido con agua micelar. 

• Máquina eléctrica: Ésta técnica arranca el vello desde el bulbo, uno a uno, por lo que tu piel puede quedar algo adolorida e irritada después del procedimiento. Pasar agua fría por la zona recién depilada ayuda a calmar el dolor. Después, puedes usar crema o aceite hidratante formulado con aloe vera o manzanilla, sus propiedades relajantes harán sentir a tu piel fresca y suave. 

• Fotodepilación: Un método eficaz y duradero, casi definitivo si se realiza correctamente. Sin embargo, el láser produce pequeñas lesiones en el folículo piloso al destruirlo. Tras las sesiones, es inevitable sentir la piel adolorida, irritada y sensible, por lo que lo mejor en estos casos es tener cuidados a profundidad. Aplica gel de aloe vera 3 veces al día durante los 3 o 4 días posteriores a la sesión. Es sumamente importante reducir al mínimo la exposición de la piel al sol, así como utilizar bloqueador solar por lo menos los 7 días posteriores. 

Lucir una piel lisa y hermosa no debe estar en conflicto con mantener una buena salud dermatológica. En realidad, se trata de priorizar tu bienestar, por lo que si incorporas estos consejos a tus rutinas depilatorias éstas deberían dejar de ser un momento doloroso; tu piel te lo agradecerá. 

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